¿Acné durante la ovulación? Por qué ocurre y cómo solucionarlo

Hormonas y acné: ¿qué relación tienen?

El acné es una de las afecciones cutáneas más comunes, y afecta hasta el 80 % de las personas en algún momento de su vida. [1] Una de las principales causas del acné son las hormonas y, más concretamente, los cambios hormonales. El acné suele aparecer en personas que atraviesan cambios en sus niveles hormonales; por eso es tan común en adolescentes. 

Cuando se trata de adultos, el acné es más frecuente en las mujeres que en los hombres. Es probable que el hecho de que nuestros niveles hormonales cambien durante el ciclo menstrual sea, al menos en parte, responsable de estos cambios en la piel. Hasta el 85 % de las mujeres con acné experimentan peores brotes durante los días previos al periodo. [2] El acné también puede aparecer o empeorar en otros momentos en los que cambian los niveles hormonales, como durante el embarazo o la menopausia.

Entonces, ¿qué pasa con las hormonas y el acné? El acné se ha relacionado con unos niveles más elevados de un tipo de hormonas llamadas andrógenos (de las que la testosterona es quizá la más conocida). Estos andrógenos hacen que las glándulas de la piel produzcan una sustancia grasa llamada sebo. El sebo es necesario para la salud de la piel (por ejemplo, ayuda a nuestra piel a retener su humedad). Sin embargo, un exceso de sebo puede provocar acné, ya que puede obstruir los poros y estimular la proliferación de bacterias.

¿Puede la ovulación provocar acné?

La respuesta corta es sí, la ovulación puede causar acné. El ciclo menstrual está regulado por nuestras hormonas sexuales, principalmente el estrógeno y la progesterona, y los mayores cambios hormonales se producen en torno a la ovulación y la menstruación. Por eso puedes notar la aparición de acné en esos momentos. 

Durante la primera parte del ciclo menstrual (la fase folicular), los niveles de estrógeno están en aumento, mientras que al mismo tiempo, los niveles de progesterona son más bajos. Alrededor de la ovulación, nuestros niveles hormonales cambian. Hay un pico en los niveles de andrógenos (específicamente testosterona). Esto estimula la producción de sebo, que puede provocar brotes de acné. [3] Tras la ovulación, los niveles de estrógeno descienden mientras que los de progesterona aumentan, y una progesterona elevada en relación con el estrógeno también puede desencadenar brotes. [4] En resumen, puedes experimentar acné alrededor de la ovulación debido a los cambios hormonales que se producen en este momento.

¿Por qué aparece el acné antes del periodo?

La segunda fase de nuestros ciclos se denomina fase lútea, y se caracteriza por unos niveles más altos de progesterona. Hacia el final de la fase lútea, cuando nos acercamos al periodo, los niveles de progesterona empiezan a descender, mientras que los niveles de estrógeno también son bajos en este punto del ciclo.

Es habitual experimentar brotes antes del periodo, y se cree que esto se debe a que la proporción de las distintas hormonas cambia. [2] También es probable que los niveles más altos de progesterona en este momento del ciclo puedan provocar acné, ya que la progesterona puede estimular la producción de sebo. [4]

¿Qué aspecto tiene el acné hormonal?

El acné hormonal es un término que se menciona habitualmente en Internet, pero en realidad no es del todo sencillo diferenciar entre “acné hormonal” y “acné normal”, ya que todos se relacionan de alguna forma con las hormonas. Sin embargo, el acné adulto (especialmente el acné adulto femenino) suele denominarse acné hormonal, probablemente porque las hormonas desempeñan un papel muy importante en esta afección. [2] Entonces, ¿que señales pueden indicar que el acné tiene un origen hormonal?

• Ubicación: el acné hormonal se describe tradicionalmente como localizado alrededor de la línea de la mandíbula, aunque también puedes tener acné en otras partes de la cara, la espalda y el pecho.
• Quistes y nódulos: el acné que da lugar a quistes o nódulos, que pueden ser muy dolorosos y difíciles de tratar, suele ser consecuencia de un exceso de andrógenos. [4]
• Frecuencia: si notas que el acné surge en los mismos momentos, por ejemplo, durante la ovulación, es posible que se deba a cambios hormonales.
• Afecciones como el SOP: el SOP (síndrome de ovario poliquístico) puede dar lugar a desequilibrios hormonales en los que los niveles de testosterona u otros andrógenos son más altos de lo habitual, lo que puede provocar acné.

Formas habituales de tratar el acné de la ovulación

El acné puede ser una afección difícil de padecer, y algunas de nosotras podemos sentir que nuestra confianza se ve afectada por los brotes. Hay muchas formas de tratar el acné, así que repasemos algunas de las más comunes. Siempre es bueno hablar con tu profesional de la salud antes de iniciar cualquier tratamiento para asegurarte de que es el adecuado para ti. Los efectos de los tratamientos contra el acné no son inmediatos, por lo que deberás esperar algunas semanas para ver cambios.

1. Tratamientos hormonales

Los anticonceptivos hormonales como la píldora anticonceptiva combinada pueden utilizarse para controlar el acné. Al detener la ovulación, tu ciclo menstrual queda “en pausa” y no se producen los cambios hormonales típicos de cada fase. La píldora combinada también inhibe la producción de andrógenos que tiene lugar alrededor de la ovulación, lo que puede ayudar a reducir el acné. [4]

Sin embargo, si decides dejar las hormonas, los síntomas pueden reaparecer. Es común que tengas acné después de suspender los anticonceptivos hormonales, incluso si nunca los has tenido antes, aunque debería desaparecer cuando el cuerpo recupere su equilibrio hormonal. Algunos métodos anticonceptivos hormonales, como el DIU hormonal, también se han relacionado con el acné, así que si estás pensando en un método anticonceptivo y te preocupan los cambios en la piel, es bueno que hables con tu profesional médico. [5]

Los anticonceptivos orales pueden utilizarse solos o en combinación con otros tratamientos para tratar el acné en las mujeres. Un ejemplo es la espironolactona, que actúa al reducir los andrógenos que desencadenan la producción de sebo (acumulación de grasa en la piel) y es especialmente eficaz para quienes padecen acné inflamatorio. [6]

2. Retinoides

Los retinoides son un tipo de compuestos químicos derivados de la vitamina A. Se presentan en muchas formas, (por ejemplo cremas y geles), y pueden utilizarse para tratar los brotes en curso y ayudar a prevenir otros nuevos. Se ha demostrado que los retinoides son eficaces para tratar el acné, ya que ayudan a normalizar la producción de grasa de la piel, así como a tratar las bacterias y la inflamación que provocan el acné. [7]

3. Antibióticos

En algunos casos, tu profesional de la salud puede recetarte antibióticos tópicos (que te pones en la piel) para tratar el acné, que actúan matando las bacterias que pueden causarlo. Los antibióticos suelen formar parte de un plan de tratamiento más amplio que incluye también otros medicamentos. Por ejemplo, también te pueden recetar una crema con retinoides o peróxido de benzoilo, otro tipo de crema que reduce las bacterias de la piel que causan el acné, que se utiliza para limitar el riesgo de resistencia a los antibióticos.

4. Isotretinoína

La isotretinoína es un medicamento de venta con receta que se utiliza para tratar el acné grave, el que causa quistes o nódulos dolorosos. Este tratamiento puede utilizarse cuando otros tratamientos no han funcionado y siempre debe ser prescrito por un profesional de la salud.

Cómo tratar el acné de la ovulación de forma natural

También existen algunos remedios naturales que pueden ayudar a reducir los brotes. Todas somos diferentes y, aunque pueden ser efectivos para algunas, es posible que no sean la mejor opción para otras. Siempre es bueno consultar con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier plan de tratamiento.

1. Aceite esencial de árbol de té

El aceite esencial de árbol de té es un aceite que tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, y se utiliza habitualmente como remedio natural contra el acné. En las investigaciones sobre el uso del aceite esencial de árbol de té para tratamiento del acné se demostraron algunos resultados prometedores y parece que reduce los brotes. Sin embargo, se necesitan más estudios para comprender mejor cómo utilizarlo con seguridad y hasta qué punto es eficaz. [8]

2. Alfahidroxiácidos

Los alfahidroxiácidos (AHA) son un grupo de ácidos derivados de diferentes fuentes animales y vegetales. Los AHA se utilizan en muchos productos diferentes para el cuidado de la piel, como cremas o sueros, y quizá sean más conocidos por su uso en cremas antienvejecimiento. Sin embargo, los productos con AHA también pueden utilizarse para tratar el acné, ya que exfolian la piel, lo que evita que los poros se obstruyan y ayudan a reducir la inflamación. [9]

3. Té verde

Puede que el té no sea lo primero que te venga a la mente cuando piensas en el acné o incluso en el cuidado de la piel en general, pero en realidad en algunas investigaciones se sugiere que el té verde puede tener algún efecto positivo sobre la piel, ya sea en forma de loción o como una infusión. El té verde contiene polifenoles (antioxidantes) que pueden ayudar a reducir la inflamación y los brotes de acné. [10] Sin embargo, los estudios realizados hasta ahora han sido escasos y se necesita más investigación.

4. Una dieta sana

Existen muchos mitos sobre el acné y sus causas, y algunos de ellos están relacionados con la alimentación. Por ejemplo, el chocolate y los snacks altos en grasa suelen mencionarse como alimentos a evitar en caso de acné. 

Es difícil identificar alimentos específicos que estén relacionados con el acné, pero en algunas pruebas se sugiere que el índice glucémico (IG) de nuestra dieta puede influir en su aparición. En pocas palabras, con el IG se hace referencia a cuánto un alimento eleva el azúcar en sangre. En un artículo de revisión se concluyó que una dieta con un índice glucémico (IG) alto podría empeorar el acné, mientras que una dieta con un IG bajo podría mejorarlo. [11] Los alimentos que entran en la categoría de IG alto suelen contener muchos carbohidratos refinados o azúcar. Los alimentos con IG bajo suelen ser ricos en proteínas, grasas y fibra, y en esta categoría encontrarás alimentos como el pescado, las verduras y las semillas.

Los lácteos son otro tipo de alimento que se menciona a menudo cuando se habla del acné. En las investigaciones se ha descubierto que los lácteos pueden empeorar el acné en personas jóvenes que siguen una dieta occidental (alimentos que se consumen habitualmente en EE. UU., Europa y Australia), lo que sugiere que otros factores también pueden estar involucrados. [11]

En lo que respecta a la alimentación, es importante recordar que todas somos diferentes, por lo que algunas podemos notar brotes después de comer ciertos alimentos mientras que otros no. Mantener una alimentación sana en general con un buen equilibrio de carbohidratos, proteínas y fibras es bueno para nuestra salud en general, pero si quieres probar una dieta específica, es bueno que hables primero con un nutricionista u otro profesional de la salud.

Cómo puede influir tu ciclo en tu rutina de cuidado de la piel

Hasta ahora, hemos analizado cómo las fluctuaciones hormonales durante el ciclo menstrual pueden afectar al acné, y algunas opciones diferentes de tratamiento. Por suerte, también podemos utilizar a nuestro favor lo que sabemos sobre los niveles hormonales durante el ciclo menstrual e incorporarlo a nuestra rutina de cuidado de la piel. ¡A continuación te compartimos nuestros mejores consejos para el cuidado de la piel en diferentes momentos de tu ciclo!

Cuidados de la piel durante el periodo

Tu ciclo comienza al principio del periodo. En este punto, la piel tiende a estar seca, ya que los niveles de las dos hormonas sexuales, la progesterona y el estrógeno, son bajos. Es un buen momento para el autocuidado, así que utiliza productos suaves para la piel. Las cremas hidratantes ayudarán a rellenar y rehidratar la piel seca.

Cuidados de la piel durante tu fase folicular (antes de la ovulación)

Cuando termina tu periodo, tu cuerpo comienza a producir estrógeno de nuevo. Esto rellena la piel y promueve la producción de colágeno, haciendo que la piel parezca fuerte y sana. Solemos ser menos sensibles al dolor durante esta etapa de nuestro ciclo, por lo que es un buen momento para llevar a cabo la depilación si forma parte de tu rutina. Hablando de cabello, ¿sabías que en algunas pruebas se sugiere que el crecimiento y la calidad del cabello también pueden verse afectados por nuestras hormonas?

El cuidado de la piel durante la ovulación

Puedes sentirte en plena forma durante la ventana fértil. Además de sentirte bien, es probable que tu piel parezca más fuerte y sana, ya que los niveles de colágeno se mantienen altos. Mientras que algunas de nosotras podemos estar resplandecientes, a otras les pueden salir algunos granos en este momento, ya que la piel es propensa a volverse un poco más grasa. Disfruta del brillo natural y mantené tu rostro limpio para evitar brotes prematuros. 

Cuidados de la piel durante la fase lútea

Tras la ovulación, los niveles más altos de progesterona aumentan la producción de sebo, lo que hace que la piel sea más grasa y puede hacernos más propensas a los brotes durante la fase lútea que precede al periodo. Limpia tu piel con regularidad y absorbe el exceso de grasa con tu mascarilla facial favorita. 

Retener agua antes del periodo es bastante habitual. Para muchas de nosotras, nuestra piel parece más hinchada durante esta época. Los antojos que acompañan al síndrome premenstrual también pueden significar que tendemos a darnos un capricho con opciones menos saludables, lo que a su vez puede repercutir en nuestro cutis. Sé amable contigo y bebe mucha agua durante este tiempo para ayudar a mantener la piel clara. 

¿Cuándo debo consultar a un profesional de la salud por el acné hormonal?

Los tratamientos sin receta suelen ser un primer paso si tienes un acné leve, pero aun así puede ser buena idea consultar a un profesional (como un farmacéutico o un profesional del cuidado de la piel) para asegurarte de encontrar un tratamiento que funcione para tu piel.

También existen varias opciones de tratamiento médico si tienes acné. Deberías consultar a tu médico o dermatólogo si:

• Tienes acné moderado o severo
• Desarrollas quistes o nódulos
• Has intentado tratar tu acné sin resultados
• El acné afecta a tu bienestar 

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